Los recursos ordinarios en el proceso penal

Este libro aborda el importante tema de los recursos ordinarios en el proceso penal. El autor considera que es tan intensa la luz que alumbra a los recursos extraordinarios, fundamentalmente al juicio de amparo, que se ha dejado de voltear hacia los ordinarios: revocación, apelación, reposición del procedimiento, etcétera, encontrándoseles actualmente huérfanos de cariño doctrinario. En esta obra se señala que a la revocación no se le ha dado la importancia que tiene, pues es inexacto que sólo proceda contra resoluciones judiciales de pocamonta; que la apelación ha sido ubicada en vagón de segunda clase; y que la reposición del procedimiento marcha sólo "en ancas de la apelación"; asimismo, se propone tocar el réquiem al recurso de denegada apelación. Ahora bien, en el proceso penal siempre se aspira a encontrar una resolución que finalice en definitiva el conflicto de intereses que surgen entre la sociedad y el inculpado, por ello, el autor propone de manera inaplazable que se eleve a rango de garantía la doble instancia, para lo que deberá sustraerse la revisión de las resoluciones judiciales de la peligrosa discrecionalidad del legislador secundario, mediante un órgano judicial distinto y superior al que las emitió. Este texto formula interesantes propuestas la apelación oficiosa en caso de condenas mayores a diez años de prisión; la procedencia del non reformativa in peius, aun en la hipótesis de que haya apelado el Ministerio Público; la unificación de los plazos para hacer valer el recurso; la adopción del sistema extensivo en la apelación; entre otras enriquecidas con la más reciente doctrina y jurisprudencia, que invitan a una lectura impostergable.