Peer Gynt · Casa de muñecas · Espectros · Un enemigo del pueblo · El pato silvestre · Juan Gabriel Borkman

Casa de muñecas, este drama fue compuesto en Alemania y estrenado en 1879, estreno que motivó enconadas discusiones de toda índole, sobre todo debido al final, en que Nora, la protagonista, abandona el hogar y a sus hijos. Realmente, Casa de muñecas significó un baluarte muy importante para el feminismo y para la emancipación de la mujer. Nora es la encarnación del ideal feminista, afirmando el derecho a vivir plenamente su vida individual y, por encima de sus deberes de esposa y madre, reivindicando sus derechos como ser humano. Sin embargo, si bien este drama sigue teniendo éxito y validez como obra literaria debido a sus novedades técnicas, en cuanto a la tesis esencial y a las ideas que defiende la obra ha perdido actualidad por haber cambiado radicalmente la posición de la mujer en la familia y en la sociedad. Espectros, es un drama realista en el sentido de que sus personajes viven plenamente y aparecen vinculados al medio noruego, aunque la realidad, hechos, personajes, etc., sirven para expresar las ideas que constituyen el fondo del drama. La idea fundamental de espectros es la de rebelarse contra el pasado, la posibilidad de liberación de los espíritus frente a las creencias, tradiciones y convenciones sociales, pues las sombras del pasado reviven y, como verdaderos fantasmas o espectros, oprimen y atemorizan al individuo. Un enemigo del pueblo, este drama es más bien un juego de oposiciones teóricas, una dramatización sencilla de la dialéctica cotidiana sobre las malas costumbres sociales, visen, esta vez, no ha ahondado demasiado en la psicología de sus personajes. Stockmann encarna el ansia de libertad, la virtud individual. Con esta obra Visen conquisto a los jóvenes, a quienes en verdad iba dirigida. El pato silvestre, es un drama realista; el simbolismo está oculto, el hombre, al salir de la cárcel, permanece hundido en el fango, sin poder levantarse más; le sucede lo que, al pato silvestre herido, que se sumerge hasta el fondo del agua y permanece agarrado de las algas con el pico, sin poder subir a la superficie. Juan Gabriel Borkman, Borkman, el protagonista de este drama, no es un guerrero sino un financista que amó el poder del dinero por el señorío que da sobre la naturaleza. Borkman sentía que su misión forzosa, absoluta, era adueñarse de la economía de su época. Pero las leyes de los hombres no saben juzgar intenciones y fue encarcelado por cinco años; luego se encerró durante otros ocho años en su habitación y por toda la casa resonaban sus pasos de lobo enfermo. Había cometido un crimen más grave que el de disponer del dinero ajeno: había apartado de sí a la mujer amada. a Ella, para casarse por conveniencia con su herma Ganhild " Mataste en mi la vida del amor ", te reprocha Ella. Y cuando al final Borkman sale otra vez a luchar, muere de frío en la falda nevada de la montaña. Sin embargo, no fue el frío de la noche quien mató a Borkman, sino el frío de su corazón. Explicó así el no haberse atrevido amar.