Milites Templi: Hechos y misterios de los caballeros templarios

A la luz de los hechos que se exponen en este libro, es indiscutible la importancia de los Templarios en la historia medieval, tanto por lo que fueron capaces de construir, organizar y administrar, como por los misterios que han surgido a partir de sus peculiaridades, y no muchas comunidades de este tipo han gozado de este reconocimiento con el correr de los siglos. Los Templarios fueron la expresión más acabada del espíritu de una época, que comienza con una revolución en el seno mismo de la Iglesia, redefiniendo su misión en la Tierra a través de un nuevo código de conducta -que revaloriza la vida en los monasterios y la Regla Benedictina-, aplicable tiempo después a los defensores de la Tierra Santa. Y creemos, más allá de las teorías conspirativas y de los muy reales enconos que existían contra el Temple, que su desaparición responde a la evolución de la sociedad, que veía acercarse a pasos agigantados el comienzo de la Modernidad e iba desechando los modelos estrictamente medievales, como el de la caballería y el de los monasterios como islas difusoras de la cultura y de la fe. Es poco creíble que una organización tan perfeccionada en sus procedimientos y tan poderosa en sus posesiones, sucumbiera a los caprichos de un rey -cuya dinastía estaba en franca declinación- o de un Papa cuyo poder era cada vez más formal y menos efectivo. Es evidente que, más allá de los ataques o los arrestos, el Temple cayó por el propio peso de su caducidad y por la pérdida de sus objetivos primigenios. Asimismo, también se hace evidente que la Historia tenía reservado un lugar diferencial para los Templarios, que fue construyendo a través de los vestigios que nos dejaron y de un enorme abanico de misterios que aún hoy nos intrigan. El espíritu de los tiempos se cobró una nueva víctima a la que, sin embargo, tenía destinado un lugar importante que le permitiría sobrevivir al paso de los años. No es poco decir.